Cómo trocear un pollo
Preparar un pollo en trozos para freír o para asar, puede resultar un reto complicado cuando en realidad es una tarea muy fácil. Eso sí, ¡sólo si se sabe cómo hacerlo!. Descubre cómo trocear un pollo y sacarle el máximo partido.
Si bien es cierto que es muy habitual encontrar el pollo ya cortado, a veces nos puede interesar comprarlo entero para realizar el despiece del pollo fresco fácilmente desde casa. Una opción que suele ser más económica que comprar sus partes por separado y que permite aprovechar muy bien su carne y cocinarla de diferentes maneras.
En guisos, en caldo, al horno o a la plancha, esta carne destaca por ser rica en proteínas de alto valor biológico, vitaminas del grupo B y minerales como el Zinc o el Magnesio. A estos beneficios se le suma su fácil digestión y su precio, siendo una de las carnes más consumidas en los hogares.
En otros post de este blog ya se ha hablado sobre las diferentes partes del pollo, pero en esta ocasión queremos mostrar paso a paso como realizar el despiece del pollo. Hacer unos cortes limpios y sencillos está al alcance de cualquiera con estas técnicas y consejos.
Aprende como trocear un pollo paso a paso:
Para empezar con el despiece necesitaremos un cuchillo bien afilado y una tabla de cocina. Para evitar la contaminación cruzada hay que recordar que la carne cruda del pollo no debe entrar en contacto con otros alimentos.
Una vez preparada la superficie de manipulación colocaremos el pollo sobre la tabla de manera vertical y comenzaremos a hacer los cortes en el siguiente orden:
- El primer paso es cortar la piel que une el muslo con la carcasa. Esto nos permitirá dislocar fácilmente los huesos de los contramuslos y separarlos del resto de la pieza. Se puede utilizar el muslo entero o bien partirlo por la mitad, cortando en la zona de la articulación para obtener los llamados muslitos de pollo o jamoncitos.
- Repetiremos el mismo procedimiento para extraer las alas: abrimos y separamos la articulación y cortamos. De igual modo, podrás trocearlas en dos partes o conservarlas enteras.
- Ahora ha llegado el momento de las pechugas. Primero quitaremos la piel con la ayuda del cuchillo. El siguiente paso es realizar un corte longitudinal para separar cada una de las pechugas del hueso central. Puedes trocear las pechugas para hacer un buen guiso o un arroz o bien filetearlas para freírlas o empanarlas.
- Al final solo nos quedará la carcasa que puede ser utilizada para realizar un rico caldo de pollo. Este esqueleto suele ser la parte más barata cuando se adquiere el pollo por separado ya que contiene poca carne a pesar de dar mucho sabor.
Trocear un pollo en cuartos
Otra opción habitual es el despiece del pollo por sus cuartos traseros y delanteros. Estas son las partes que incluye cada uno de ellos:
- Cuartos delanteros. Formados por las pechugas y las alitas. Cuando la parte delantera del pollo se divide en dos obtenemos los cuartos delanteros (el equivalente a una cuarta parte del ave).
- Cuartos traseros. Incluye el muslo y el contramuslo en una sola pieza. También suele incluir la espalda o el espinazo cuando no se separa con la carcasa.
¡Y hasta aquí los cortes para despiezar un pollo paso a paso!
Lo sentimos, los comentarios para esta publicación han sido desactivados.